La galería representa el puente entre dos universos: el mundo natural, introspectivo y sensible, y el mundo urbano, vibrante y crudo del graffiti. Este contraste es la esencia  y la identidad de Suppob.

Aquí, la belleza surge de la adversidad. Cada obra es un recordatorio de que las mayores riquezas nacen de los lugares más inesperados: pinturas gestuales que revelan una calma profunda, y graffitis cargados de energía visceral que gritan resistencia.

Las pinceladas espontáneas, las manchas impulsivas y el trazo suelto atraviesan cada pieza, combinando calma y caos en una danza expresiva que habla directamente desde el alma del artista.

Explorá esta dualidad y descubrí obras únicas donde lo crudo y lo sensible conviven en cada gesto.